jueves, 5 de mayo de 2011

Ni los bomberos apagan este incendio.


En diálogo con Miguel Angel Roja dejó declaraciones después de la derrota ante Bomberos donde se vivió una jornada empañada por la polémica. Esto nos decía:

"Aprovecho este medio para contestarle a Daniel Tronnes, ya que no me dieron opción al descargo, y se basaron en sus mentiras para aplicar sanciones injustas.
Ni el jugador le protesto, ni yo lo amenace, como puso en el informe, lo único que le dije era que yo iba a informar los excesos de autoridad, los gritos, las prepoteadas a los jugadores y sus provocaciones que incitaban a la violencia. Si esto lo asusto y lo llevo a mentir, provocando más daño que el que había realizado en el partido, le sugiero visite a un psiquiatra, se lo recomiendo de todo corazón, porque algún desequilibrio debe haber, no creo que tanta soberbia y maldad pueda ser resistida teniendo conciencia de lo que está realizando.
 Me despido pidiéndole a Dios que aclare sus pensamientos, para que no destruya lo que tanto trabajo y esfuerzo estamos construyendo. No me gusta protestarle a los árbitros, pero cuando algo es alevoso me veo en la obligación de hacerlo."

Ni los bomberos pueden extinguir las llamas de esta polémica, donde se ve a un árbitro fuera de su rol, bien lo dice la palabra, debe arbitrar y ser un ente neutral, poniendo paños fríos en la cancha y marcando límites con esas dos tarjetas que tiene en el bolsillo. La soberbia en un árbitro no debe prevalecer, mas allá de ser la autoridad, debería ser un ejemplo de cordialidad, con una personalidad bienaventurada, enseñándoles a los jugadores los valores del “fair play”.


Rodrigo Pinto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario